La Invocación Cuando el sol de agosto calcinaba las cumbres de la Sierra P'urhépecha, un viento cálido y antiguo comenzaba a danzar entre los pinares. Era el aliento de Cuerauáperi, la señora de las nubes, despertando de su letargo anual. Sus suspiros viajaban de monte en monte, convocando a los hijos de la etnia purhé …